En el marco de una acción de amparo, que se inició el 5 de noviembre de 2007, el juez federal Mario Racedo, ordenó una vez más a los dueños del ingenio La Trinidad una serie de medidas para prevenir y recomponer el medio ambiente. También dispuso que el gobierno controle su cumplimiento y a su vez cree un sitio de Internet para que la ciudadanía pueda denunciar casos de contaminación. El juez dio tregua hasta la zafra 2011 para que los efluentes líquidos del ingenio se encuentren dentro de los valores permitidos.
El ingenio La Trinidad, uno de los más contaminantes de la provincia, está hace más de dos años bajo la lupa de la Justicia Federal, pero todas las medidas que se ordenaron hasta el momento parecen haber caído en un saco roto. Otra vez, el juez federal subrogante Nº 2, Mario Racedo, ordenó a la fábrica azucarera realizar de modo inmediato un plan de prevención y recomposición del medio ambiente, en el marco de una causa que se había iniciado el 5 de noviembre de 2007 por una acción de amparo presentada por Miguel Enrique Ibrahim, un vecino del pueblo homónimo.
En una nueva resolución, difundida en el sitio oficial de la Corte de la Nación, Racedo también dispuso que el Gobierno provincial, a través de la Secretaría de Medio Ambiente o de quien se determine, controle el efectivo cumplimiento de ese programa bajo apercibimiento de responsabilizarlo por el incumplimiento o demora en la ejecución. Además, el Estado provincial tendrá que fiscalizar el cumplimiento de las exigencias impuestas y crear un sitio en Internet para que las ONGs y el público en general puedan denunciar casos de contaminación.
Cuando recibió la acción de amparo, hace casi dos años, Racedo había convocado, en una medida inédita, a una audiencia pública para escuchar las opiniones de representantes de los Estados nacional y provincial; defensores del Pueblo y de peritos universitarios, con respecto a la contaminación del ingenio azucarero. Luego, como segundo paso, dio lugar al amparo y dispuso una serie de medidas obligando a la firma Azucarera del Sur S.R.L a disminuir el daño ambiental que povocaba en la zona.
En el camino, se detectaron incumplimientos por parte de la fábrica, por lo que Racedo volvió a llamarles la atención, ordenando nuevas medidas, mientras continuaban las quejas de los vecinos de La Trinidad por el alto grado de contaminación ambiental que se reflejaba en el aire y en las aguas donde desembocan los efluentes de la industria azucarera.
Ahora, en la nueva sentencia, el magistrado dispuso la zafra 2011 como plazo máximo improrrogable para que los efluentes líquidos se encuentren dentro de los valores permitidos vigentes en las normas ambientales provinciales y nacionales.
http://www.primerafuente.com.ar/nota.asp?id_seccion=2&seccion=&id_nota=53614
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