GRAVE PERJUICIO FINANCIERO AL ESTADO NACIONAL, Y AL YMAD Y A CATAMARCA
En febrero próximo se cumplirá un año desde que dos geólogos tucumanos denunciaron ante la Justicia Federal, con asiento en la provincia, que la empresa no declara ganancias por la exportación de minerales por un monto anual superior a los 8.000 millones de dólares. Sin embargo, la investigación no avanza. Poderosos intereses.
02/01/2011 11:06 PM | En febrero próximo se cumplirá un año desde que fue presentada ante la Justicia Federal de Tucumán una denuncia sobre un ocultamiento de ganancias por más de 40.000 millones de dólares por parte de la firma Minera Alumbrera, en perjuicio del Estado nacional y de sus socios del Yacimiento Minero Aguas de Dionisio-YMAD (constituido por la Universidad Nacional de Tucumán y el Gobierno de Catamarca). Sin embargo, la causa, que está en manos del titular del Juzgado Federal Número I, Daniel Bejas, sigue paralizada y no hubo un avance significativo en la investigación.
La denuncia
La demanda fue promovida por los geólogos tucumanos Guillermo Amilcar Vergara y Miguel Gianfrancisco, quienes mediante la realización de un estudio sobre metalogénesis llegaron a comprobar que Minera Alumbrera solamente declara, para su tributación, la exportación de oro, cobre y molibdeno, pero omite informar sobre la extracción y venta al exterior de importantes cantidades de una lista de casi 50 minerales de alto valor económico, entre ellos: escandio, titanio, cromo, cobalto, cesio y uranio.
De acuerdo a la demanda de los profesionales, con la exportación no declarada de esos metales se estaría consumando una evasión de más 8.000 millones de dólares por año.
Para llegar a esa cifra, los licenciados Vergara y Gianfrancisco realizaron un cálculo sobre las cantidades vendidas al exterior, el precio en dólares por gramo de cada uno de los mencionados minerales y el tributo que deberían haber ingresado al Estado Nacional, a Catamarca y al YMAD.
En su planteo, los geólogos recordaron que el Código de Minería de la Nación establece que los primeros cinco años la firma minera estaba libre de impuestos, por lo que la evasión impositiva real estimada abarca, hasta comienzos de 2010, (que es cuando se concretó la demanda) siete años. A partir de dichas consideración, el monto del fraude - evasión ascendería a más de 40.000 millones de dólares.
¿Qué hizo la Justicia?
La demanda, presentada el 16 de febrero de 2010, fue recibida por el fiscal federal general de Tucumán, Antonio Gustavo Gómez, quien, luego de recabar información, en base a otros planteos, amplió la denuncia, dándole un fuerte impulso a la causa.
Sin embargo, por disposición del procurador general de la Nación, Esteban Righi, Gómez dejó las actuaciones en poder de la Fiscalía Federal Número I, a cargo de Emilio Ferrer. Como este último renunció el pasado 31 de octubre para acogerse al beneficio de la jubilación con el 82 por ciento móvil, la investigación volvió a cambiar de manos y llegó al titular de la Fiscalía Número II, Carlos Brito, quien a su vez está a cargo interinamente del despacho que dejó vacante Ferrer.
La última movilización importante que tuvo la causa ocurrió en mayo del año pasado, cuando el entonces fiscal Ferrer se acercó hasta la minera, muñido de una orden judicial firmada por Bejas y acompañado por personal de Gendarmería Nacional. Debía tomar muestras de las rocas que exporta la empresa para analizarlas y determinar si la denuncia tenía algún grado de certeza. Pero la negativa de las autoridades de la minera "impidió que se cumpliera con el procedimiento", reconoció una fuente cercana a la investigación.
Por su parte, los responsables de Minera Alumbrera explicaron que Gendarmería no pudo extraer las muestras debido a que la empresa no había sido informada con la suficiente antelación de la decisión judicial y afirmaron que la notificación del procedimiento se había "enviado a un domicilio equivocado". A cambio, la empresa le ofreció a Bejas hacer una "entrega voluntaria" de material para su análisis, lo cual todavía no se concretó.
Desde que Brito se hizo cargo de la investigación, en noviembre de 2010, todavía no se produjo ninguna novedad en la causa.
“Hay vocación de paralizar”
Frente a ello, el geólogo Vergara perdió la paciencia y denuncio que la Justicia Federal tucumana tiene "paralizada" desde hace un año a la investigación. "Aparentemente, hay vocación de paralizar esta causa donde lo que debería definir es si efectivamente se produjo ocultamiento de ganancias de unos 8.000 millones de dólares anuales durante más de cinco años", indicó el académico tucumano a la prensa.
Por otro lado, Vergara cuestionó al magistrado Bejas porque “aceptó que la empresa haga una entrega voluntaria de rocas, que está viciada de nulidad porque la empresa es la investigada”.
La muestra tomada de La Alumbrera por los geólogos se realizó en un laboratorio multinacional, y allí, en lugar de tres, "aparecieron casi cincuenta metales", indicó Vergara. Entre los "olvidados" se contó al escandio o el titanio, ambos utilizados en la industria aeroespacial que tienen una cotización aproximada de 2.500 dólares la tonelada.
La explicación empresarial fue que "esos metales podrían estar pero en tan ínfima proporción que no interesan".
Pero, para Vergara, ésas son nada más que excusas. "Se llaman metales traza porque están en pequeñas proporciones pero tienen un valor muy elevado. El oro también es escaso y allí está, además de que es brillante, dorado y no se oxida, la explicación de su precio", argumentó.
El tránsito cansino de la causa deja entrever la fuerte presión que ejercen los poderosos capitales mineros extranjeros sobre un sector de la Justicia argentina, para poder seguir saqueando los recursos de nuestro territorio.
Grave perjuicio financiero para el YMAD, Catamarca y la Nación.
Conforme señala el expediente de la causa, a la que tuvo acceso EL SIGLO, a nivel de cada uno de sus socios locales, el perjuicio financiero ocasionado por Minera Alumbrera con la exportación no declarada de valiosos minerales sería el siguiente:
* Al YMAD (Yacimientos Mineros Aguas del Dionisio): el veinte por ciento del valor bocamina durante doce años, mas un tres por ciento adicional -regalías- al gobierno de Catamarca, totaliza: Al Gobierno de Catamarca, 11.903.526.000 de dólares (por el 12 por ciento del 20 por ciento mencionado), más 2.975.881.500 de dólares (3 por ciento en concepto de regalías), o se un total de 14.879.407.500 de dólares.
* A la Universidad Nacional de Tucumán 7.935.684.000 de dólares (por el 8 por ciento del 20 por ciento mencionado).
* Deuda Tributaria a la Nación Argentina, por el 30 por ciento del valor del mineral no declarado durante los últimos siete años: 17.360.148.750 de dólares.
Es decir, el monto total de la evasión y fraude ascendería, hasta principios del año pasado, a 40.175.240.250 de dólares.
Ello sin tomar en cuenta que a dicha cifra deberían agregarse los montos correspondientes a intereses, actualizaciones, daños (morales y materiales) y perjuicios.
La causa está paralizada en la Justicia Federal de Tucumán desde hace casi un año.
Mientras tanto, los millones y los metales; siguen saliendo de nuestro país.
La denuncia
La demanda fue promovida por los geólogos tucumanos Guillermo Amilcar Vergara y Miguel Gianfrancisco, quienes mediante la realización de un estudio sobre metalogénesis llegaron a comprobar que Minera Alumbrera solamente declara, para su tributación, la exportación de oro, cobre y molibdeno, pero omite informar sobre la extracción y venta al exterior de importantes cantidades de una lista de casi 50 minerales de alto valor económico, entre ellos: escandio, titanio, cromo, cobalto, cesio y uranio.
De acuerdo a la demanda de los profesionales, con la exportación no declarada de esos metales se estaría consumando una evasión de más 8.000 millones de dólares por año.
Para llegar a esa cifra, los licenciados Vergara y Gianfrancisco realizaron un cálculo sobre las cantidades vendidas al exterior, el precio en dólares por gramo de cada uno de los mencionados minerales y el tributo que deberían haber ingresado al Estado Nacional, a Catamarca y al YMAD.
En su planteo, los geólogos recordaron que el Código de Minería de la Nación establece que los primeros cinco años la firma minera estaba libre de impuestos, por lo que la evasión impositiva real estimada abarca, hasta comienzos de 2010, (que es cuando se concretó la demanda) siete años. A partir de dichas consideración, el monto del fraude - evasión ascendería a más de 40.000 millones de dólares.
¿Qué hizo la Justicia?
La demanda, presentada el 16 de febrero de 2010, fue recibida por el fiscal federal general de Tucumán, Antonio Gustavo Gómez, quien, luego de recabar información, en base a otros planteos, amplió la denuncia, dándole un fuerte impulso a la causa.
Sin embargo, por disposición del procurador general de la Nación, Esteban Righi, Gómez dejó las actuaciones en poder de la Fiscalía Federal Número I, a cargo de Emilio Ferrer. Como este último renunció el pasado 31 de octubre para acogerse al beneficio de la jubilación con el 82 por ciento móvil, la investigación volvió a cambiar de manos y llegó al titular de la Fiscalía Número II, Carlos Brito, quien a su vez está a cargo interinamente del despacho que dejó vacante Ferrer.
La última movilización importante que tuvo la causa ocurrió en mayo del año pasado, cuando el entonces fiscal Ferrer se acercó hasta la minera, muñido de una orden judicial firmada por Bejas y acompañado por personal de Gendarmería Nacional. Debía tomar muestras de las rocas que exporta la empresa para analizarlas y determinar si la denuncia tenía algún grado de certeza. Pero la negativa de las autoridades de la minera "impidió que se cumpliera con el procedimiento", reconoció una fuente cercana a la investigación.
Por su parte, los responsables de Minera Alumbrera explicaron que Gendarmería no pudo extraer las muestras debido a que la empresa no había sido informada con la suficiente antelación de la decisión judicial y afirmaron que la notificación del procedimiento se había "enviado a un domicilio equivocado". A cambio, la empresa le ofreció a Bejas hacer una "entrega voluntaria" de material para su análisis, lo cual todavía no se concretó.
Desde que Brito se hizo cargo de la investigación, en noviembre de 2010, todavía no se produjo ninguna novedad en la causa.
“Hay vocación de paralizar”
Frente a ello, el geólogo Vergara perdió la paciencia y denuncio que la Justicia Federal tucumana tiene "paralizada" desde hace un año a la investigación. "Aparentemente, hay vocación de paralizar esta causa donde lo que debería definir es si efectivamente se produjo ocultamiento de ganancias de unos 8.000 millones de dólares anuales durante más de cinco años", indicó el académico tucumano a la prensa.
Por otro lado, Vergara cuestionó al magistrado Bejas porque “aceptó que la empresa haga una entrega voluntaria de rocas, que está viciada de nulidad porque la empresa es la investigada”.
La muestra tomada de La Alumbrera por los geólogos se realizó en un laboratorio multinacional, y allí, en lugar de tres, "aparecieron casi cincuenta metales", indicó Vergara. Entre los "olvidados" se contó al escandio o el titanio, ambos utilizados en la industria aeroespacial que tienen una cotización aproximada de 2.500 dólares la tonelada.
La explicación empresarial fue que "esos metales podrían estar pero en tan ínfima proporción que no interesan".
Pero, para Vergara, ésas son nada más que excusas. "Se llaman metales traza porque están en pequeñas proporciones pero tienen un valor muy elevado. El oro también es escaso y allí está, además de que es brillante, dorado y no se oxida, la explicación de su precio", argumentó.
El tránsito cansino de la causa deja entrever la fuerte presión que ejercen los poderosos capitales mineros extranjeros sobre un sector de la Justicia argentina, para poder seguir saqueando los recursos de nuestro territorio.
Grave perjuicio financiero para el YMAD, Catamarca y la Nación.
Conforme señala el expediente de la causa, a la que tuvo acceso EL SIGLO, a nivel de cada uno de sus socios locales, el perjuicio financiero ocasionado por Minera Alumbrera con la exportación no declarada de valiosos minerales sería el siguiente:
* Al YMAD (Yacimientos Mineros Aguas del Dionisio): el veinte por ciento del valor bocamina durante doce años, mas un tres por ciento adicional -regalías- al gobierno de Catamarca, totaliza: Al Gobierno de Catamarca, 11.903.526.000 de dólares (por el 12 por ciento del 20 por ciento mencionado), más 2.975.881.500 de dólares (3 por ciento en concepto de regalías), o se un total de 14.879.407.500 de dólares.
* A la Universidad Nacional de Tucumán 7.935.684.000 de dólares (por el 8 por ciento del 20 por ciento mencionado).
* Deuda Tributaria a la Nación Argentina, por el 30 por ciento del valor del mineral no declarado durante los últimos siete años: 17.360.148.750 de dólares.
Es decir, el monto total de la evasión y fraude ascendería, hasta principios del año pasado, a 40.175.240.250 de dólares.
Ello sin tomar en cuenta que a dicha cifra deberían agregarse los montos correspondientes a intereses, actualizaciones, daños (morales y materiales) y perjuicios.
La causa está paralizada en la Justicia Federal de Tucumán desde hace casi un año.
Mientras tanto, los millones y los metales; siguen saliendo de nuestro país.
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